¿Cómo se puede reciclar el agua para su jardín al aire libre?

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Para reciclar el agua en tu jardín al aire libre, puedes utilizar sistemas de captación de agua de lluvia, que recojan el agua de los techos y la dirijan a un barril. También es efectivo reutilizar aguas grises provenientes de lavabos o duchas, siempre que sean seguras para las plantas.

¿Sabía que el riego de jardines representa alrededor de un tercio de todo el uso residencial de agua en los Estados Unidos? Eso significa que arrojamos 7 mil millones de galones (26,5 mil millones de litros) de agua limpia y potable en nuestros jardines todos los días. [source: EPA]! ¿Cómo podemos reducir esta cantidad? Al reciclar el agua. Así como reciclar aluminio, vidrio, plástico y papel disminuye la cantidad de basura en nuestros vertederos, reciclar agua reduce la cantidad de agua que se drena en nuestros sistemas de alcantarillado. Quizás la forma más barata y fácil de hacer esto es recolectar las aguas residuales usadas o sin tratar de su hogar e irrigar su jardín al aire libre con ellas.

Se sorprendería de la cantidad de agua que puede desviar con seguridad de la alcantarilla a su jardín. Una gran fuente es el drenaje de su techo. Muchas casas ya están equipadas con canaletas que se pueden adaptar fácilmente para canalizar el agua de lluvia hacia los barriles. Aquí se puede almacenar hasta que necesite regar sus plantas durante un clima más seco. También puedes reciclar agua gris, que es el drenaje de sus fregaderos, duchas, lavandería, lavaplatos y otras fuentes que no son inodoros. Capturar esta agua puede requerir un poco más de esfuerzo, pero el beneficio para el medio ambiente y su billetera puede hacer que valga la pena reciclar las aguas grises.

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Entonces, ¿exactamente por qué debería tomarse la molestia de reciclar el agua? Por un lado, contribuye a un medio ambiente saludable. Se desvía menos agua de los ecosistemas sensibles hacia nuestros suministros de agua municipales y, como resultado, se descargan menos aguas residuales ricas en nutrientes en estos ecosistemas. Si bien esto puede parecer algo bueno, los altos niveles de nutrientes que se encuentran en las aguas residuales en realidad pueden ser dañinos, fomentando el crecimiento de algas y ahogando otras formas de vida acuática. Reciclar agua también ahorra energía al reducir la necesidad de bombearla de ríos, embalses o del suelo y, en algunos casos, transportarla cientos de millas para satisfacer las demandas de ciudades áridas. Y si esas razones no le atraen, hay algunos beneficios muy importantes para usted como usuario del agua. El agua reciclada puede ayudar a reducir sus facturas de servicios públicos y, por lo general, no está sujeta a restricciones de uso durante épocas de sequía.

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