¿Qué significa la polarización catódica?
La polarización catódica es un fenómeno electroquímico que ocurre en la superficie de un electrodo, donde se produce una disminución del potencial del cátodo, generando un efecto de protección contra la corrosión. Este proceso se utiliza en el tratamiento de estructuras metálicas para prevenir daños causados por el ambiente.
Este es un método de control de la corrosión en el que se cambia el potencial del ánodo o del cátodo, o de ambos. Esto minimiza la pérdida de metal y reduce la fuerza impulsora de la reacción de corrosión. La protección contra la corrosión se logra cuando la diferencia de potencial se reduce al mínimo.
Industriapedia explica la polarización catódica
Cabe señalar que se producirá una reacción catódica cuando haya un cierto potencial en el cátodo. Cuando se alcanza este potencial, el gas hidrógeno burbujea desde el cátodo, lo que indica un proceso de reducción. La sobretensión de hidrógeno es la diferencia de potencial entre el electrodo de hidrógeno y el cátodo en la misma solución y en equilibrio.
La sobretensión del hidrógeno se ve afectada por la temperatura y la rugosidad de la superficie del metal. Un aumento de la temperatura y la rugosidad de la superficie dará como resultado una disminución de la sobretensión del hidrógeno.
Las cifras más comunes de sobretensión incluyen:
Platino = 0,12 V
Aluminio = 0,19 V
Níquel = 0,24 V
Hierro = 0,27 V
Plata = 0,29 V
La sobretensión en aguas de pH bajo con iones de hidrógeno altos se puede controlar fácilmente. Dado que algunos metales no se corroen en algunos medios ácidos, el hidrógeno absorbido es responsable de la despolarización de la célula. Esto reduce la fuerza impulsora de la reacción de corrosión. La eliminación de hidrógeno del cátodo despolariza la reacción de corrosión y, a su vez, aumenta la posibilidad de pérdida de metal.
En niveles altos de pH donde no se puede superar la sobretensión del hidrógeno, en aguas naturales, la velocidad de reacción catódica está controlada por el oxígeno disuelto. Una reacción de corrosión solo se puede polarizar cuando la cantidad de oxígeno que se disuelve en la superficie del metal es controlable. Los sistemas cerrados se protegen fácilmente ya que el oxígeno disuelto forma un óxido, por lo que no hay más oxígeno disponible. Las principales reacciones catódicas se pueden controlar manteniendo el pH alcalino para maximizar la sobretensión del hidrógeno.
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