Eliminación de calafateo de poliuretano

El calafateo de poliuretano se adhiere muy bien y tiene una textura gomosa que se puede pintar una vez que se aplica. Sin embargo, puede ser muy difícil de quitar una vez que está puesto, y parece que solo el buen esfuerzo de codo hará el truco. Sin embargo, algunos métodos y productos pueden aumentar las posibilidades de éxito en la eliminación de la masilla de poliuretano.

Paso 1 - Humedecer

Use agua para ablandar la masilla vieja.

Paso 2 - Eliminador químico

Probablemente necesitará probar varios métodos. Los removedores químicos, como removedores de pintura o removedores de masilla, se usan para ablandar la masilla para que sea más fácil de raspar. Asegúrese de colocar un periódico o una cubierta protectora debajo del área donde está trabajando. Además, asegúrese de estar trabajando en un área ventilada.

Para usar el removedor químico, aplique una capa gruesa a la masilla que desea eliminar. Para evitar que se seque, pon papel encerado encima. Lea las instrucciones del producto para determinar el tiempo que necesita para dejarlo reposar.

Podrás comenzar a quitar el removedor y la masilla una vez que notes que la superficie está burbujeando. Use una segunda capa si es necesario.

Paso 3 - Raspar

Puede quitar la masilla de poliuretano con una herramienta 5 en 1 para pintores. Esta herramienta especial es un esparcidor, raspador, espátula, parcheador de grietas y removedor de pintura, todo en uno. Tiene un borde plano, una serie de dientes en forma de peine y un semicírculo (destinado a correr a lo largo de un rodillo para quitar la pintura adicional). No es costoso (generalmente cuesta menos de $10) y es lo suficientemente pequeño como para llevarlo en el bolsillo. Puede ser de madera, plástico o metal.

Es posible que también le resulte útil un cortador de cajas o una navaja para quitar la masilla. Cualquier cosa que pueda meterse debajo de la masilla vieja y sacarla puede ser útil.

Paso 4 - Cincel

Dado que el poliuretano forma una unión muy fuerte y puede ser extremadamente difícil de quitar, ve a la ferretería y echa un vistazo. Es posible que lo que obtenga no solo lo sorprenda, sino que también funcione, especialmente en un área concreta como una piscina. Un cincel de ¼ de pulgada y un cuchillo multiusos pueden hacer el truco. Use la navaja multiusos para hacer un corte vertical en el calafateo rebelde. Esto le dará un lugar para colocar el cincel debajo de la masilla para despegarla. Deténgase a menudo para afilar el cincel.

Paso 5: lana de acero o cepillo de alambre

Una vez que haya eliminado la mayor parte de la masilla, es posible que aún deba limpiar el área. Para entrar en las grietas, use lana de acero y un cepillo de alambre para raspar los restos de masilla.