Cómo solucionar problemas de un motor sobrecalentado I Guía Completa

Un motor sobrecalentado en su automóvil puede dañar el motor de manera importante, lo que resulta en facturas de reparación considerables. Si su automóvil comienza a echar humo, revise el motor de inmediato para encontrar la causa del problema.

Su principal línea de investigación será el sistema de refrigeración, que incluye el radiador, la bomba de agua, el termostato, las mangueras de entrada/salida y el ventilador de refrigeración.

Paso 1: Verifique el nivel de refrigerante del motor

El primer paso es comprobar el nivel de refrigerante. Si el nivel de líquido es bajo o está completamente seco, hacer funcionar el motor puede causar daños importantes. Hay dos lugares donde puede verificar sus niveles: el depósito de refrigerante y el radiador mismo.

Dale al motor un minuto para que se enfríe si ha estado funcionando. Es una buena idea usar guantes tolerantes al calor para mantener las manos seguras durante este proceso.

Muchos depósitos de refrigerante tienen una marca útil para indicar un nivel bajo e informarle sobre el tipo de refrigerante que necesitará comprar. El nivel de refrigerante en el tanque de reserva debe estar entre las marcas etiquetadas caliente y frío o lleno y bajo, según la marca y el modelo de su vehículo.

El nivel de refrigerante dentro del radiador debe estar aproximadamente una pulgada por debajo de la abertura del radiador. Si no puede ver ningún líquido dentro del radiador, apriete las mangueras a cada lado del radiador para ver si pueden contener líquido.

Si el nivel es bajo, puede haber una fuga, ya sea en el motor o en el suelo. Llene el radiador y el depósito de refrigerante inmediatamente con el refrigerante adecuado antes de volver a conducir el vehículo para evitar más daños en el motor.

Paso 2: verifique el termostato del motor

Un termostato de motor incluye una válvula que se abre cuando el motor se calienta a cierta temperatura. Una vez que se alcanza la temperatura, el fluido se libera en el sistema para absorber el calor radiante del motor y alejarlo hacia el sistema del radiador de enfriamiento.

Cuando el termostato del motor no funciona, puede impedir que el refrigerante llegue al radiador, lo que hace que el líquido se caliente y contribuya a la falla del motor. Otra posibilidad es que la válvula del termostato esté atascada en la posición abierta, sin mantener el fluido alejado del motor el tiempo suficiente para que se enfríe.

Para determinar si el problema de sobrecalentamiento del motor es causado por el termostato, retire la manguera que se conecta al termostato (afloje el accesorio de la manguera con unos alicates o un destornillador) y drene el líquido en un recipiente para volver a colocarlo en el sistema más tarde.

A continuación, retire el termostato (busque un manual de piezas para el modelo de motor si es necesario para obtener instrucciones específicas) y examine visualmente el termostato en busca de daños.

Puede probar la funcionalidad del termostato colocándolo en una olla con agua y subiendo el fuego. El termostato debe abrirse justo antes de que el agua alcance la temperatura de ebullición. Si la válvula termostática no se ha abierto cuando el agua está hirviendo, debe reemplazarse con una pieza nueva.

Paso 3: inspeccionar el ventilador eléctrico

Un ventilador de refrigeración eléctrico también ayuda a reducir la temperatura del refrigerante, lo que evita el sobrecalentamiento. Cuando el ventilador no funciona, el refrigerante permanece caliente, lo que hace que el motor se sobrecaliente y falle.

Para probar el ventilador de enfriamiento eléctrico, asegúrese de que el automóvil esté apagado (desconecte la batería para estar lo más seguro posible) e intente girar la cuchilla manualmente. Si no gira fácilmente, será necesario reemplazar el ventilador.

Si el ventilador gira con facilidad, arranque el automóvil y luego encienda el aire acondicionado. El ventilador debe encenderse en unos minutos. Si no es así, deberás cambiar el fusible del ventilador para identificar la primera de las posibles fallas eléctricas.

Si el reemplazo del fusible del ventilador no funciona, el siguiente paso es verificar el cableado y los componentes eléctricos. Si el sistema eléctrico está conectado y funciona y el ventilador aún no funciona, debe reemplazarse.

Paso 4: pruebe el radiador

La bomba de agua es el mecanismo que fuerza el refrigerante en el radiador. Luego, el calor se elimina del refrigerante a través de aletas de enfriamiento en los tubos del radiador.

Cuando el radiador no funciona correctamente, el calor permanece en el refrigerante y puede provocar que el motor se sobrecaliente e incluso se agriete. Este es un proceso gradual y, por lo general, se nota en un momento de tensión en el automóvil, como cuando conduce cuesta arriba en un clima cálido.

Para comprobar si hay un problema con el radiador, deje que el motor se enfríe y busque fugas de líquido alrededor del cuerpo del radiador. Compruebe si hay piezas dobladas, rotas o agujeros en el radiador. Luego, retire la tapa del radiador y examine el interior del radiador.

Si hay una gran cantidad de suciedad o escombros en el sistema, signos de daño físico, trozos aceitosos de color amarillo/marrón/verde/naranja en el líquido o alrededor del borde de la abertura, o falta de líquido en el radiador mismo, el Es posible que sea necesario reemplazar, enjuagar o llenar el radiador.

Refrigerante espeso, aceitoso y grueso - Enjuague el radiador manualmente o con una máquina de enjuague especializada. Compruebe el bloque del motor en busca de signos de daño.

Cuerpo del radiador dañado o con fugas - Reemplace el radiador y las mangueras.

Fuga de refrigerante cerca del tapón de drenaje - Reemplace el enchufe si es posible. Si la fuga continúa, reemplace el radiador y las mangueras.

Paso 5: examine el convertidor catalítico

El principal dispositivo de control de emisiones de un automóvil es el convertidor catalítico. Si bien puede parecer no relacionado, este sistema esencialmente permite que el motor respire.

Cuando el convertidor catalítico no funciona correctamente, puede obstruir el sistema de escape. Esto, a su vez, puede hacer que el motor sobrecargue el sistema de enfriamiento con los gases acumulados que intentan escapar. Esto puede conducir a un motor sobrecalentado, incluso con un radiador y un sistema de enfriamiento saludables.

Si hay un problema con el convertidor catalítico, es probable que el motor también pierda potencia.